Llevo ocho meses barriendo tristezas en el alma..........Que puede decir una hija para despedir a sus padres en un viaje sin retorno...
En mayo, estábamos mi padre, mi hermana y yo en el cementerio del pueblo los tres solos con el sacerdote por única compañía para despedir a nuestra madre...
Nuestro querido padre no ha sabido vivir sin ella porque desde niños han estado juntos...
Han recorrido un largo camino siempre del brazo uno del otro como si fueran una misma persona...,y, desde mayo hasta octubre tuvo el corazón entristecido por su ausencia.
Quiero recordarlos juntos y felices como cuando pasaban el verano en el pueblo.
Delfín era feliz en Estébanez, recorriendo sus tierras, sus chopos, sus frutales, sentado en el patio haciendo tareas interminables en la despensa...., y, luego, del brazo de nuestra madre, por las tardes iban a la iglesia a rezar juntos.
De Eloina que decir, fue siempre una madraza, consentidora y cariñosa que también fue feliz en su "casina" como ella decía.
Con sus flores y sus pequeñas cosas lleno su vida, y, como no, recordando a su querida montaña, su querido Reyero al que se sintió siempre muy unida por los lazos familiares que allí tenia y recordaba con gran cariño.
Los dos han sido felices con las cosas mas sencillas; su felicidad ha girado entorno a nuestra felicidad, en sus sueños y sus anhelos, nosotras, Pedro y Enrique que mi padre ha querido como a un hijo, siempre hemos sido su prioridad.
Queridos padres, gracias por la vida que nos habéis dado, gracias por vuestros cuidados, vuestros desvelos, vuestro amor infinito, los brazos siempre abiertos para ayudarnos a mi hermana querida y a mi..., os deseamos un feliz viaje juntos por la eternidad.
Para que mis cuitas siguieran mi Perrin decidió irse con ellos ahora en febrero, mis tres viejitos "adorados", que llenaban gran parte de mi vida, me han dejado sola...., sus huecos en mi alma son profundos, irrellenables, dolorosos, su recuerdo me oprime, me estruja el corazón. Quiero pensar que los tres están en un lugar mejor, que velan mi sueño...., pero me siento zaherida cada vez que vienen a mi mente, cada vez que se pasean por mis sentimientos. Ya sé que para los tres había llegado su hora pero el duelo no me lo quita nadie y tengo vestido el corazón de un negro riguroso, y por dentro lloro lagrimas calientes que me ruedan por las laderas del alma y me encharcan de melancolía todo lo que miro.
El ciclo de la vida sigue, pero se me antoja más frágil y mas perecedero, la pandemia no ayuda a curar heridas, me hace más vulnerable esta distópica situación, los amigos y la familia no pueden casi abrazarme, todo es raro con un halo siniestro de tiempos peores, como un apocalipsis anunciado a bombo y platillo. Los jinetes pululan a sus anchas, el hambre, la guerra, la peste y la muerte están todo el día presentes en las noticias de un modo tan exponencial que se nos hace costumbre en la mente.
Yo lucho por imitar al ave Fénix, y resurgir con pequeñas estrategias, con herramientas emocionales pero se hace duro el trayecto e incierto el destino....
"Y si un día no tienes ganas de hablar con nadie, llámame..., estaremos en silencio"; Gabriel García Márquez
LILITRANA
Dedico esta pagina a mi querida amiga Geni, ella siempre quiere tapar los agujeros de mi corazón.