Son las seis de la mañana y no puedo dormir, estoy inquieta, con
hormigueos y frágil muy frágil, necesito tener cuidado en los movimientos que
realizo pues pareciera que mi antojadizo cuerpo fuera de gelatina, a la vez
quebradizo y pudiera romperse en cualquier momento… otro cruento brote me ha
obligado a quedarme de baja así,… de un día para otro…estoy ansiosa, agotada, cansadísima
un cansancio que reverbera por todo mi cuerpo y se extiende a mi mente, los
olvidos son constantes, los dolores permanentes, el intestino totalmente
alterado, escribiendo esto se me embota la mente y mis ojos se anegan de
lagrimas por la impotencia que siento en estos momentos…momentos aciagos, de
debilidad física y sobre todo lo más peligroso para mí en esta situación…
mental, hay momentos….¡SOY HUMANA!... quiero tirar la toalla, que cansada
estoy.
Me viene a la mente la típica y tópica pregunta… ¿Por qué a mí?...
qué tontería…
Estoy abrumada, sobrepasada, descolocada, desubicada,
olvidadiza, dolorida, muy dolorida, cansada, muy cansada…
Hace tiempo… bueno desde mi anterior brote que no puedo hacer la
gimnasia pasiva…ahora me lesiona… solo puedo hacer taichí e ir al spa que me
relaja mis doloridos músculos.
Tuve la osadía de cortarle el pelo a Gonsin… y creí cuando
termine que me crujía viva… no era capaz de incorporarme…
A pesar de este desahogo de mi mente estoy orgullosa de mí… pues
he conseguido lo que me propongo desde hace tiempo, bueno por lo menos en parte…
y se trata de que cuando me preguntan como estoy, fingir; y decir que estoy bien. Siempre estoy mal… pero es cansino y
repetitivo, y malo para la mente meterle esos pensamientos…
Cuando me recupere, que
lo haré como en otras ocasiones, seguiré
con me terapia mental, con mi mantra…”estoy bien”, “estoy bien”, no soporto que se compadezcan
de mi, tal vez sea un atisbo de orgullo, pero me da igual, me supera… y eso es
positivo para mí, porque no quiero ni puedo admitir que yo sea una víctima y
provoque “pena” pues no y no.
Me hincho como un globo, me deshincho… realmente es agotadoR.
Bueno… ya me he lamido suficientemente las heridas por hoy…
vasta de lamentaciones, volveré a la cama, antes me tomo un relajante muscular
para aminorar un poco el sufrimiento y tal vez me duerma… voy, voy a pensar en
cosas bonitas, que a mí me gustan, relajantes, felices, con color, con
felicidad, con energía, con amor, y así todo lo iré superando de nuevo como
siempre hago, y como siempre hare hasta el final.
El cancerbero… me acompañara hasta el final de mis días, mas…
seguro que yo llegare cansada, pero él estará también agotado de mi lucha.
Y por supuesto, jamás, jamás me rendiré.
Cuento estos sentimientos tan íntimos, para demostrarle a las
personas que sufren una enfermedad como la mía u otra crónica que todo lo que
quieres puedes, y aunque la cruda realidad es la que es… tu y solo tú tienes
las armas en tu mente y en tu corazón para hacer que la vida sea observada por
tu mente desde el prisma que quieras ofrecerle… yo personalmente siempre voy a
elegir el que tenga colores más irisados, más brillantes, más transparentes y
con mas fulgor.
Dedico esta página a las personas que sufren de fibromialgia
como yo.
Luisa Martínez-LILITRANA